6 errores cuando sales al mercado a conseguir nuevas oportunidades

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Entre mis clientes y otros profesionales que me consultan, me he dado cuenta de una serie de errores que cometen o han cometido al momento de salir al mercado a buscar nuevas oportunidades.Cuando tienen que hacerlo por decisión propia o porque han sido despedidos, muchos de ellos no saben CÓMO hacerlo, no saben QUÉ decir, DÓNDE y a QUIÉNES tocar puertas.

Si estás en una situación similar, te invito a NO cometer estos errores, sino que actuar en sentido totalmente contrario:

 

  1. No buscar ayuda, no tocar puertas, no ampliar redes: muchos se quedan encerrados en el mismo círculo de personas incluso hay algunos que aún no asumen que están en una nueva situación y no les cuentan ni siquiera a sus amigos que han sido despedidos o que están buscando nuevas oportunidades. Tampoco buscan ayuda profesional (que la hay y mucha) o incluso, lo que es peor, ¡creen que son los únicos en esa situación y que nadie los puede ayudar!, por lo tanto, siguen sin pedir ayuda. Un eterno círculo vicioso.
  2. Dejar la empresa sin continuar la relación: muchos cambian su actual trabajo por otro o por un negocio que emprenden, pero no se les ocurre que su antiguo empleador ¡puede ser su primer cliente! No negocian ni intentan proyectar la relación, la cortan, no la hacen crecer. ¡No te vayas sin construir sobre lo que ya tienes! Tienes que capitalizar todas las relaciones y oportunidades y tenerlas siempre de tu lado. Los millonarios piensan “las 2 cosas”, puedes tener una nueva oportunidad sumándole la relación actual. Sólo tienes que encontrar la mejor manera de cómo hacerlo.
  3. Cerrarte al mercado nacional o al conocido: cerrarte a lo conocido y si la economía de tu país está mal, entonces no hay más opciones. Piensa en el mundo, no en tu país. Hay miles de oportunidades que internet te trae a tus manos, sin moverte de país ni de casa, y también de país y de casa, con familia y todo. Mira el mercado global, identifica las oportunidades y ve tras ellas. No te cierres al mercado local, salta la frontera.
  4. Vienen de un empleo y buscan otro empleo: es lo mismo que lo anterior, siguen pensando en lo que ya conocen, quieren un nuevo empleo ojalá lo más parecido al anterior, pero con más desafíos, más sueldo y un mejor jefe. ¿Y si emprendes? ¿Y si eres inversionista? ¿Y si te conviertes en asesor? ¿Y si mezclas empleo con un negocio? ¿por qué tiene que ser un empleo? Si tienes la fortuna de tener un espacio para abrirte a las oportunidades, parte por abrir tu mente e indaga otras fuentes de ingreso, desarrollo y satisfacción.
  5. Activan la red pidiendo empleo y sin un foco claro: otra vez ¡no! ¡no hagas esto! Hay muchos buscando y pidiendo trabajo. Muéstrales tu valor en vez de pedirles trabajo ¿qué necesidades tiene tu mercado, tu futuro trabajo? ¿Cómo les ayudas tu a resolver sus problemas? ¿qué ganan contigo? Además focalízate, idntifica qué buscas y en eso profundiza, no tires para todos lados como un generalista, porque el que es más especializado es más valorado en el mercado, y además le facilitas el camino a tu cliente o empleador, porque tu ya sabes lo que quieres y no le haces pensar al otro en qué es lo mejor para ti.
  6. Perder contacto con tu red, tu mercado y contigo mismo: esto es algo muy común en personas que están mucho tiempo empleadas, están tan cómodas y seguras que dejan de alimentar su red profesional, ir al mercado a ver qué pasa allá afuera (que no es así de estable y seguro como su empleo), y lo que es peor, ?¡pierden contacto consigo mismos!, con sus propias fortalezas y valor, porque están tanto tiempo desarrollando una función que dejan de mirarse ellos mismos como profesionales valiosos y activos, capaces de crear valor. Entonces cuando salen afuera no hay red, o está dormida, y no hay contenido para ir a presentarte. No dejes de venderte NUNCA y alimenta tu red siempre porque ella te alimentará.

¿Te ves relejado en esto? ¿Cómo superas estas barreras?

Para más, visita www.moverepersonas.com o escríbeme a lorena@moverepersonas.com

Un saludo,

Lorena Nuñez J.

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